Ir al contenido principal

¿Víctima o protagonista?

Leí esta mañana un artículo de un coach que abordaba con este título aquello a lo que yo hace unos días me refería como la "responsabilidad de la propia vida". Me gustó mucho el enfoque y está, sin duda mucho mejor explicado de lo que yo lo hago.

Explicaba que ante la vida hay dos actitudes básicas, la de las personas que sufren cosas y la de las personas que hacen cosas. Un ejemplo muy claro nos lo dan los niños. Cuando llega un niño a casa si tiene algún suspenso dice "Me han suspendido", en lugar de no he estudiado lo suficiente... y si tiene buenas notas "He sacado un sobresaliente". Se "responsabiliza de las cosas buenas que le pasan pero no de las otras.

Muchas veces, he reproducido ese modelo. Aunque poco a poco he ido descubriendo el impacto que mis decisiones y actos tienen en las reacciones de las personas que me rodean y en las cosas que me pasan.

Es verdad que no podemos elegir lo que nos pasa, pero sí, lo que hacemos con ello, cómo hacerle frente y el aprendizaje que de ello queremos sacar. Me gusta esa forma de ver la vida que me permite hacer modificaciones. Para algunas personas tiene desventajas, porque te "obliga" a hacer cosas en lugar de quejarte. Eso no significa que no me afecten las cosas, las emociones las sentiré igual sólo que de alguna manera la vivencia posterior y lo que hago con ella puedo elegirlo.

Yo prefiero ser protagonista más veces ¿y tú?

Comentarios

Entradas populares de este blog

No hay que preocuparse hay que ocuparse...

La primera vez que escuché esta frase me pareció una estupidez. Típica afirmación para "arreglarte la vida". En realidad, pensé, yo no elegía preocuparme... me preocupaba porque pasaba algo... Me hizo gracia la explicación de pre-ocuparse. En realidad, es como anticipar la ocupación... pensando en cosas en general negativas. Leí no hace mucho una frase que me gustó mucho: La mente se orienta a lo que escucha, por eso comunica en positivo... Si la mente se orienta a lo que escucha o a lo que la "ocupa" y la preocupación, en realidad, no es más que anticipación de cosas malas que pueden pasar va a resultar que es cierto que no tiene sentido preocuparse. Aunque al principio me pareciera una tontería he hecho consciente el hecho de que efectivamente cuando estoy "ocupada" no tengo tiempo de "preocuparme" me centro en buscar soluciones y no en anticipar problemas... De manera que me he propuesto dar más importancia a la ocupación que a la preocupació

El único amor eterno es el no correspondido...

Todavía resuenan en mi cabeza estas palabras que escuché ayer por la noche, tomando algo con unos amigos... Me pregunto si eso es así. Si no somos capaces de disfrutar lo que tenemos y nos pasamos nuestra vida anhelando lo que no llega. Al final, esto no lo leí sólo con el amor en si mismo, sino en general con nuestros sueños, con las cosas que nos hacen felices. ¿Vivimos desintegrados pensando continuamente que nos haría feliz una cosa distinta de la que tenemos? De alguna forma, cuando elijo una cosa aparto otra de mi vida. Si estoy con alguien no estoy solo, si trabajo en una empresa no trabajo en otra, si quiero desarrollarme en el trabajo sacrifico tiempo de hacer otras cosas, si tengo familia veo menos a mis amigos... es ley de vida... porque el tiempo es limitado. Aunque nos gustaría que el día tuviera 40 horas para dedicar todas las horas que necesito al trabajo, a las cosas que me gustan, a mi familia o mis amigos... no es así. Es necesario elegir... Tener un sueño está muy bi

Un cuento .... de actitud... con Luis Galindo

Hace unos días en una conferencia con Luis Galindo compartió el siguiente cuento que me encantó. Decía así, a la entrada de un pueblo estaba sentado un viejecito con un bastón. Apareció un caminante, que se detuvo ante el viejecito para preguntarle: "Buen hombre, ¿me puede decir como es la gente de este pueblo?". El viejecito, a su vez le preguntó: "¿Cómo era la gente con la que ha vivido en otros lugares?". Al caminante, se le cambió la cara y repuso: "Las personas con las que he vivido en otros lugares, eran personas complicadas y egoístas, que se pasaban el día comentando sobre la vida de los demás, personas inmaduras y quejicas."  Entonces, el viejecito le contesto: "Pues aquí son iguales." Entonces, el caminante prosiguió su camino.  Al rato, apareció otro caminante. Se dirigió también al viejecito y saludándole , le pregunto: "Buen hombre, ¿sabría decirme como es la gente de este pueblo?". El viejecito, de la misma manera! Le