Ir al contenido principal

La luciérnaga y la serpierta: fábula

Hoy me han mandado esta pequeña fábula que me gustaría compartir:

"Cuenta la Leyenda, que una vez, una serpiente empezó a perseguir a una luciérnaga; esta huía rápido con miedo de la feroz depredadora, y la serpiente no pensaba desistir.
Huyó un día, y ella no desistía, dos días y nada.....
En el tercer día, ya sin fuerzas la Luciérnaga paró y dijo a la serpiente:
    -Puedo hacerte tres preguntas???
 -No acostumbro dar ese privilegio a nadie pero como te voy a devorar, puedes preguntar...
    -¿Pertenezco a tu cadena alimenticia?
 -No, contestó la serpiente....
    -¿Yo te hice algún mal?
 -No, volvió a responder
   -Entonces, ¿Por qué quieres acabar conmigo?
 -Porque no soporto verte brillar...!"

Muchos de nosotros nos hemos visto envueltos en situaciones donde nos preguntamos: ¿Por qué me pasa esto si yo no he hecho nada malo? Sencillo… porque algun@s no soportan ver brillar a otro. 

Cuando esto te pase no dejes de brillar, continúa y sigue dando lo mejor de ti mismo, sigue haciendo lo mejor y no podrán tocarte, porque tu luz seguirá intacta pase lo que pase, tu esencia permanecerá.

Me gustó y por eso decidí compartirlo. 
Pensé en las veces en las que el brillo de alguien me había entristecido, y había sido serpiente... porque no sólo los demás son envidiosos. Espero que te ayude, no sólo para darte fuerza cuando seas luciérnaga sino para darte cuenta cuando te conviertes en serpiente. Cuantas más luciérnagas haya más brillará el mundo.

Comentarios

Entradas populares de este blog

No hay que preocuparse hay que ocuparse...

La primera vez que escuché esta frase me pareció una estupidez. Típica afirmación para "arreglarte la vida". En realidad, pensé, yo no elegía preocuparme... me preocupaba porque pasaba algo... Me hizo gracia la explicación de pre-ocuparse. En realidad, es como anticipar la ocupación... pensando en cosas en general negativas. Leí no hace mucho una frase que me gustó mucho: La mente se orienta a lo que escucha, por eso comunica en positivo... Si la mente se orienta a lo que escucha o a lo que la "ocupa" y la preocupación, en realidad, no es más que anticipación de cosas malas que pueden pasar va a resultar que es cierto que no tiene sentido preocuparse. Aunque al principio me pareciera una tontería he hecho consciente el hecho de que efectivamente cuando estoy "ocupada" no tengo tiempo de "preocuparme" me centro en buscar soluciones y no en anticipar problemas... De manera que me he propuesto dar más importancia a la ocupación que a la preocupació

El único amor eterno es el no correspondido...

Todavía resuenan en mi cabeza estas palabras que escuché ayer por la noche, tomando algo con unos amigos... Me pregunto si eso es así. Si no somos capaces de disfrutar lo que tenemos y nos pasamos nuestra vida anhelando lo que no llega. Al final, esto no lo leí sólo con el amor en si mismo, sino en general con nuestros sueños, con las cosas que nos hacen felices. ¿Vivimos desintegrados pensando continuamente que nos haría feliz una cosa distinta de la que tenemos? De alguna forma, cuando elijo una cosa aparto otra de mi vida. Si estoy con alguien no estoy solo, si trabajo en una empresa no trabajo en otra, si quiero desarrollarme en el trabajo sacrifico tiempo de hacer otras cosas, si tengo familia veo menos a mis amigos... es ley de vida... porque el tiempo es limitado. Aunque nos gustaría que el día tuviera 40 horas para dedicar todas las horas que necesito al trabajo, a las cosas que me gustan, a mi familia o mis amigos... no es así. Es necesario elegir... Tener un sueño está muy bi

Un cuento .... de actitud... con Luis Galindo

Hace unos días en una conferencia con Luis Galindo compartió el siguiente cuento que me encantó. Decía así, a la entrada de un pueblo estaba sentado un viejecito con un bastón. Apareció un caminante, que se detuvo ante el viejecito para preguntarle: "Buen hombre, ¿me puede decir como es la gente de este pueblo?". El viejecito, a su vez le preguntó: "¿Cómo era la gente con la que ha vivido en otros lugares?". Al caminante, se le cambió la cara y repuso: "Las personas con las que he vivido en otros lugares, eran personas complicadas y egoístas, que se pasaban el día comentando sobre la vida de los demás, personas inmaduras y quejicas."  Entonces, el viejecito le contesto: "Pues aquí son iguales." Entonces, el caminante prosiguió su camino.  Al rato, apareció otro caminante. Se dirigió también al viejecito y saludándole , le pregunto: "Buen hombre, ¿sabría decirme como es la gente de este pueblo?". El viejecito, de la misma manera! Le