Esta semana (a través de un boletín que se llama VESP) recibí en mi correo un cuento que me gustó mucho. Contaba lo siguiente:
"Parece que hubo un tiempo en las cosas californianas, en las que abundaba la pesca. Como consecuencia de ello, los pelícanos en lugar de pescar esperaban la vuelta de los pescadores con los barcos llenos de pescado para "comer". No tenían que hacer ningún esfuerzo.
Con el paso del tiempo, la pesca fue disminuyendo y entonces los pelícanos, que ya no sabían pescar, empezaron a morir.
Entonces a las autoridades, se les ocurrió "traer" pelícanos salvajes que sirvieran de modelo a los "domesticados" y volvieran a enseñarles a pescar. Funcionó y las aves domesticadas recuperaron su capacidad de alimentarse".
Me hizo pensar en todas las cosas que me "amodorran" en mi vida y que hacen que me instale en mi zona de confort, esperando que no pase nada.
Al final, muchas veces se me olvida "como se pesca" porque las cosas son demasiado fáciles, se me olvida como plantear otras cosas que no son las que "siempre" han funcionado. Y para eso, hay que mantenerse despierto y relacionarse con distintas personas que piensan de formas diferentes... para no amodorrarse en la rutina...
De manera que ¿como se buscan pelícanos salvajes que me ayuden a no dejarme llevar?
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