El otro día en una conferencia me explicaban que nuestros cerebros están programados para SOBREVIVIR y que con "el miedo de no sobrevivir" reacciono y busco alternativas... sino entro en la llamada zona de confort, me relajo, ¿me abandono?
Me quedé pensando en las personas que me rodean y que con la crisis se han encontrado con una "expulsión" de la zona de confort. De forma involuntaria, se encuentran ahí fuera, perdidos y ... ¿por necesidad? se ha activado su instinto más básico: la supervivencia es lo que está ahora en juego.
Parece que la activación de la supervivencia, me hace más creativo, más imaginativo, ya no puedo estar tranquilo porque no tengo todo asegurado... necesito reinventarme.
Curioso, porque la crisis me está colocando en situaciones de constante búsqueda de la supervivencia. Me he encontrado ya con varias personas que tenían un sueño... que no podían cumplir porque ya habían empezado a andar, no por el camino que querian exactamente...pero habían empezado... y claro desandar lo andado cuesta... salvo que la vida te vuelva a colocar en la casilla de salida... y entonces no queda más remedio. Hay que volver a empezar... ¿mala suerte? Tal vez no tanta, porque puedes volver a empezar a andar hacia otro sitio diferente, hacia tu sueño. ¿No?
Una de las personas que conozco quería emprender, pero la vida (y su esfuerzo, por supuesto) le colocó en altos puestos directivos, expatriado, grandes sueldos, distintos destinos, ¿como dejar todo para volver a empezar con una familia? ¿una locura?
No obstante, la vida le ha dado una oportunidad de volver a empezar, sin querer. Y ahora se encuentra embarcado en el proyecto de cumplir sus sueños, la enseñanza, el emprendimiento. Sin elegirlo, se ha encontrado con una nueva oportunidad, de conseguir lo que quiere. Nunca es tarde para encontrar el camino y llegar a donde sueño. ¿Y tú a que esperas?
Comentarios
Publicar un comentario